Sydney en tres palabras si me preguntas que me viene a la mente cuando pienso en esta ciudad.
Las moscas se concentran en la zona de la Opera. No habia visto tantas moscas pegajosas en mi vida. Se te pegan en el brazo, el pelo, la nariz. Son repelentes.
Los Gays abundan en toda la ciudad, pero encuentran su lugar de culto en Oxford St. Anoche estuvimos alli. Despues de casi tres anyos nos aventuramos a la calle a horas intempestivas (las 22.00 hrs, com tornam...) y nos dirigimos a la zona de ambiente. Siendo fin de semana de Halloween la cosa ya estaba de lo mas variada y nos encontramos un multicolor ambiente. Acostumbrados como estamos a nuestra vida aislada del loco mundo, yo tenia el vello de punta y los ojos como platos observando al personal. Hay que ver, hace tres anyos nos hubieramos mezclado con la marabunta y hubieramos dado rienda suelta a nuestros instintos. Ayer fue para nosotros un record el haber conseguido tomar un par de copas, echarnos unas buenas risas, y regresar a casita antes de la 1 de la manyana...Es lo que hace llevar esta vida de estresados que llevamos...no tenemos nada que sacar del cuerpo los fines de semana!
Nuestras sospechas se confirman y cada vez nos damos mas cuenta de que la ciudad no es lo nuestro, y que vayamos donde vayamos, o bien campo o playa, o mucho mejor: las dos cosas a la vez y no muy lejos una de la otra.
Me olvide mas fotos de Fidji en casa, asi que vendran con el proximo post :)
Las moscas se concentran en la zona de la Opera. No habia visto tantas moscas pegajosas en mi vida. Se te pegan en el brazo, el pelo, la nariz. Son repelentes.
Los Gays abundan en toda la ciudad, pero encuentran su lugar de culto en Oxford St. Anoche estuvimos alli. Despues de casi tres anyos nos aventuramos a la calle a horas intempestivas (las 22.00 hrs, com tornam...) y nos dirigimos a la zona de ambiente. Siendo fin de semana de Halloween la cosa ya estaba de lo mas variada y nos encontramos un multicolor ambiente. Acostumbrados como estamos a nuestra vida aislada del loco mundo, yo tenia el vello de punta y los ojos como platos observando al personal. Hay que ver, hace tres anyos nos hubieramos mezclado con la marabunta y hubieramos dado rienda suelta a nuestros instintos. Ayer fue para nosotros un record el haber conseguido tomar un par de copas, echarnos unas buenas risas, y regresar a casita antes de la 1 de la manyana...Es lo que hace llevar esta vida de estresados que llevamos...no tenemos nada que sacar del cuerpo los fines de semana!
Nuestras sospechas se confirman y cada vez nos damos mas cuenta de que la ciudad no es lo nuestro, y que vayamos donde vayamos, o bien campo o playa, o mucho mejor: las dos cosas a la vez y no muy lejos una de la otra.
Me olvide mas fotos de Fidji en casa, asi que vendran con el proximo post :)
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