
Me encantan los trenes lentos.
En ellos la vida pasa más despacio
y hasta a veces se detiene para que
unos entren...y otros salgan.
Son precisamente los trenes lentos
los que dibujan sonrisas; aquellos
donde se crean las amistades más cortas,
pero también las que más perduran
en nuestras memorias.
Mirando por la ventana de mi tren
encuentro infinidad de momentos e
infinidad de personas.
Instantáneas que olvido al momento
para dejar paso a las siguientes...
1 comment:
m'ha agradat el teu text
respira realitat i vida
una abraçada viatgers !
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