Dios mío que me pongo??

Vaya tela...el traje lo aparqué hace tiempo y los únicos que tengo son los de buceo, y bien, como que no es plan...Le doy vueltas a mi vestuario, y mis básicos y fondo de armario en Indonesia se reducen a un puñado de bikinis y licras de buceo; combinados con unos cuantos vestiditos, camisetitas, falditas - y una chaquetita para las noches fresquitas. Demasiados ITAS.

Y entonces...que se pone una para recibir al dueño de un holding de empresas de Oriente Medio todopoderoso que resulta ser tu jefe y al que vas a ver en breves horas? Jolinas, de pequeña era distinto, cuando venían los Reyes Magos de Oriente no había ni que saludarlos, es más, no te dejaban ni recibirlos, con dejar una zapatilla al lado del arbolito o del Belén y esperar toda la noche ya se cumplían tus sueños...Vaya rollo ésto de ser mayor.

Llevo una semana sacando y metiendo ropa del armario, dándole vueltas, haciendo pruebas...y no me aclaro. El blanco porque es blanco y es muy claro y se transparenta un poco. Con ésto se me ve casi el hombro y  ésto otro casi no me tapa las rodillas. Esto no es lo suficientemente ancho y ésto, no te tapa demasiado?. Me pongo pañuelo en la cabeza? Me despinto las uñas de los pies? Me ato las manos por si se me olvida que no puedo darle la mano? No consigo juntar dos piezas que conjunten y me hagan parecer una bolsita de patatas más o menos neutra. Josep entra de vez en cuando al bungalow y se parte de risa, con lo fácil que el lo tiene - pantalón y camisa, un buen apretón de manos y allá vamos.  Entre faldas y pantalones nos echamos unas risas y respiramos hondo, llevamos mucho tiempo esperando este momento.

Menos mal que por dentro ambos lo tenemos tremendamente claro,  preparados, seguros y calmados. Apenas quedan unas horas y cada vez estamos más tranquilos. Pensando grande y pisando fuerte, que vienen realidades.

Sabeis qué? He pensado que esta noche voy a dejar una chancla de cada uno en el  árbol que está pegando a nuestro bungalow...nunca se sabe.